¡The World Revolution!
La revolución de la inteligencia
Jesús Torres Navarro
“La mayor parte de los hombres tiene una capacidad intelectual muy superior al ejercicio que hacen de ella.”
José Ortega y Gasset
El siglo XXI se caracteriza por la incertidumbre, por la hegemonía del pensamiento a corto plazo y por el convencimiento de que no se necesita adoptar medidas y acciones de prevención. La incertidumbre genera impotencia, el pensamiento a corto plazo recorta el valor de la memoria hasta extremos que pueden dejarnos sin futuro y el desdén por la prevención nos hace irremediablemente fatalistas; es un caldo de cultivo fértil para que los intolerantes y poderosos señores de la guerra y del mal siembren con éxito odio, discordia y exclusión enfrentando a pueblos contra pueblos llevándonos hacia el abismo de nuestra propia destrucción.
Un fantasma recorre el mundo, surgen por doquier como hierba mala cotos de poder y dominio de la intolerancia y el neofascismo, los ciudadanos comunes no tenemos ni defensa ni respuesta razonada que contenga su expansión. La llegada de Trump a la Casa Blanca es, además del más reciente, el más notorio y terrible ejemplo de ello.
Ya desde antes de asumir el cargo de presidente de los EEUU nos advirtió: gritó y gritó “ahí viene el lobo feroz”; y el lobo feroz llegó el 20 de Enero de 2017. Llegó como el primer jinete del apocalipsis, ahora recorre el mundo sembrando odio, desolación y angustia a diestra y siniestra.
Durante su primera semana en el puesto logró unificar en su contra a muchas personas de a pie en todo el mundo; a ciudadanos comunes de prácticamente todos los países incluidos muchos de los propios ciudadanos de su país. De inmediato nos vimos involucrados en esta lucha que no pedimos pero que como quiera tendremos que afrontar y hacerla nuestra, de todos.
El prepotente y soberbio Trump le ha declarado la guerra a nuestro querido México y al mundo. El gobierno, los partidos y los políticos mexicanos aunque sabían que eso iba a ser así, no lo esperaban tan pronto ni de esa manera, tienen un modo de pensar cortoplacista por eso sus respuestas rápidas y viscerales que, además pretenden hacer virales, fueron precisamente las que el tirano esperaba. El pueblo con reservas, desconcertado y con miedo aplaudió las enérgicas respuestas dadas a Trump. Los políticos oportunistas ahora se han colocado al frente del movimiento contra Trump y los EEUU, ya envalentonados nos quieren llevar a la guerra; ellos que tienen el uso hegemónico de los espacios públicos serán los guías y planearán desde sus mansiones y sus lujosas oficinas con la complicidad maléfica de las televisoras oligárquicas, la estrategia que según ellos va a lograr que se dé marcha atrás a las políticas de Trump. De hecho en las últimas encuestas creció como nunca la aceptación nacional a Peña.
La lucha no es entre países como lo ve Trump: EEUU contra él mundo. Pretender que con acudir a la ONU se puede echar abajo las medidas adoptadas e implementadas por Trump y su gobierno en contra de México y del mundo, es una ocurrencia visceral a bote pronto que sólo engrandecería más la soberbia del tirano y posicionaría a los oportunistas que lanzan ese tipo de propuestas. Es trabajando juntos, los ciudadanos libres con el pueblo damnificado de los EEUU y con los pueblos del mundo como se podrá lograr la victoria, incluso derrocar a Trump.
Esta es una lucha global, The World Revolution, y no se va a ganar si vamos a ella apoyando a nuestros gobiernos, a los partidos y a los políticos que siempre le han fallado al pueblo, sino al revés, triunfará tarde o temprano, más temprano que tarde, si hacemos de ella una auténtica lucha global de ciudadanos libres; las muchas minorías permanentemente excluidas unidas bajo un objetivo común: llevar a la victoria a la World Revolution y acabar para siempre con las tiranías fascistas en todo el mundo. Nos espera una larga lucha que no tiene nada que ver con cuestiones electorales; no es política ni diplomática, es una lucha por nuestra supervivencia. Los políticos no nos representan, nuestros sueños y anhelos no caben en las urnas ni se alcanzarán con decretos ni con políticas públicas, la democracia representativa ya dio lo que tenía que dar, está agotada, en ninguna parte del mundo acuden a votar ni siquiera el 50% de los votantes, continuar aferrándose a ella es tiempo perdido, es sumamente riesgoso, es peligroso. Llegó el momento crucial de dar todos los pueblos del mundo el gran salto hacia la verdadera Democracia Global Real:
¡DEMOCRACIA GLOBAL PARTICIPATIVA Y CIUDADANA YA!
Pensar el futuro inteligentemente
Se pensó el futuro por primera vez cuando el ser humano fabricó las primeras herramientas para usarlas y guardarlas con la intención de volver a usarlas más adelante. El avance de la ciencia y la tecnología están ligados en una simbiosis permanente con el ejercicio de pensar el futuro.
No se trata de predecir el futuro, sino de encontrar en el pasado y el presente las semillas de odio y exclusión sembradas. El momento y la forma en que germinaron. Su proceso de maduración y lo que han ocasionado. Así como sus probables consecuencias para el futuro próximo inmediato; pensar el futuro es construcción, percepción y previsión, no es predicción.
Retomo en demérito del pensamiento cortoplacista lo que dijo el célebre Séneca: “¡no existe viento favorable para la persona que no sabe dónde va!”
Propongo detener unos minutos el habitual, rutinario y vertiginoso ritmo con que vivimos nuestra vida para pensar el futuro y su relación con el desconcertante momento actual en el que el narcisista Trump con sus absurdas acciones retrógradas pretende sumir al mundo en un nuevo obscurantismo autoritario y fascista.
Comencemos por reconocer que las acciones y políticas de Trump y su gobierno no sólo dañan a nuestro amado México, sino a todo el mundo y también de manera muy especial a nuestros hermanos estadounidenses. A ese gran pueblo que en su mayoría se conforma por migrantes y descendientes de migrantes. Todos los mexicanos tenemos parientes y/o amigos que viven del otro lado.
Los nuevos desafíos no se pueden enfrentar con éxito siguiendo las recetas tradicionales. Todas las ideas, incluso las sagradas, deben adaptarse a las nuevas realidades.
Parafraseando al gran poeta Antonio Machado diré: apoyo incondicionalmente a todo aquel que dice lo que piensa, con una condición, que piense muy bien lo que dice, que lo piense tres veces cuando menos. El que piensa una vez lo que dice repite lo que flota en el ambiente, aquello que soltaron quienes controlan las diferentes corrientes de opinión; algunos lo piensan dos veces, son los políticos, dicen lo que les conviene para quedar bien, parecer simpáticos, ganar votos o bajarle bonos a algún contrincante. El que piensa tres veces lo que dice pide tiempo, adquiere un compromiso con la verdad, dice lo que le exige su propia conciencia y se adueña de sus opiniones, abre un espacio para la lentitud que es fundamental en estos vertiginosos tiempos en que vivimos bajo la dictadura de lo urgente, porque los dogmas son producto de la prisa del pensamiento.
Vamos a unirnos no para estar juntos, sino para hacer algo juntos como ciudadanos libres, iguales y pensantes innovando, creando nuevas formas y estrategias de lucha para conducir esta fase crucial de la World Revolution hacia la victoria avanzando siempre: dos pasos adelante y un paso hacia atrás. Implementemos acciones locales de alto impacto con visión y alcance global en las ciudades, pueblos y comunidades, redes sociales, centros de estudio y trabajo, charlas familiares y con amigos; con solidaridad, respetando las diferencias y con plena libertad para expresarnos. Gente de todos los pueblos del mundo unidos contra Trump y su gobierno y contra aquellos gobiernos de otros países que sistemáticamente violan los Derechos Humanos universales, que promueven y hacen las guerras comerciales y militares dentro y fuera de sus países, que para proteger los espurios intereses de los poderosos a quienes sirven, están destruyendo el planeta y asesinando inocentes ¡los vamos a derrotar!
La World Revolución ha de anteponer siempre los superiores intereses del desarrollo social global, el respeto irrestricto y el ejercicio libre y pleno de los Derechos Humanos universales, el cuidado y recuperación de nuestro medio ambiente en todo el planeta; y la instauración de la Democracia global participativa y ciudadana.
La lucha en esta etapa es defensiva, es una respuesta a un artero ataque y la mejor manera de defendernos es rescatar los espacios públicos para dignificar las voces individuales. Vivimos malos tiempos para la política. Los ciudadanos hemos dejado de creer en las promesas configuradas como simples reclamos electorales, políticos o diplomáticos. La corrupción se instala en el centro de la vida y se convierte en práctica cotidiana, estamos perdiendo la capacidad de sorprendernos. La democracia representativa, las organizaciones políticas y el Estado dan muestras irremediables de agotamiento. En las nuevas dimensiones de la globalización dignificar las voces individuales supone defender la ética de los espacios públicos, la palabra pensada tres veces representa una apuesta clara por ciudadanos libres capaces de matizar, meditar, sentir, romper dogmas y corrientes manipuladas de pensamiento, hasta lograr hacerse dueños de sus propias opiniones.
Exijámosle a nuestros gobernantes que se unan como ciudadanos y empleados nuestros que son a sus pueblos, que hagan suyas nuestras banderas de lucha contra el neofascismo que, las alas más duras de las derechas y las izquierdas globales radicales y trasnochadas quieren imponer unilateralmente en todos los países.
Luchamos por la igualdad y la dignidad globales, por los Derechos de las benditas Mujeres que en esta lucha les corresponde jugar un papel de primera línea, se lo tienen ganado desde siempre. Por La paz mundial, contra el sistema salvaje de mercado, por el planeta y el cuidado de nuestro medio ambiente, con amor al prójimo y felices, por la verdadera Democracia global real YA y por tantas y tantas causas justas más. No perdamos de vista que el fin último y el principal objetivo de la Democracia Global Real es: ¡LA DEMOCRATIZACIÓN GLOBAL DE LA FELICIDAD!
¿Qué es la World Revolution? Es una idea inacabada muy antigua que continúa construyéndose, un ideal de cambio global, una propuesta para la humanidad toda, es el sueño de muchos en un mundo de paz y armonía con base en el amor y el respeto hacia los demás. Es el gobierno de los ciudadanos libres, por los ciudadanos libres y para los ciudadanos libres. Se ha venido construyendo con las ideas aportadas de miles de grandes pensadores de todos los tiempos, menciono sólo algunos de ellos. Hace más de 2,400 años en Grecia el gran filósofo Platón la describió magistral y detalladamente en su gran obra La República.
Jesús Cristo predicó amor y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad: “amaos los unos a los otros”, ama a tu prójimo como a ti mismo en una época muy similar a la actual hace 2000 años. Buda Gautama en la India y Mahoma en el Oriente Medio también hicieron lo propio.
En el siglo XVII Lutero y Calvino sembraron en Alemania la semilla que germinó en las primeras revoluciones campesinas de emancipación de la historia y en la reforma religiosa de Europa, al mismo tiempo hicieron de la prosa alemana una de las más bellas del mundo.
Los llamados socialistas utópicos del siglo XVIII Saint Simon, Fourier y Owen en Europa señalaron que la esencia de un mundo futuro de paz y armonía se centraba en los ideales de Libertad, Igualdad y Fraternidad, ideas que hicieron suyas los grandes revolucionarios independentistas de América Latina a principios del siglo XIX.
Hegel desarrolló la idea dialécticamente destacando el hecho innegable de que el desarrollo del universo se rige por la ley de las concatenaciones totales, sus escritos fueron y son lectura obligada para los estudiosos del derecho y las ciencias sociales y sentaron las bases para una mejor comprensión del mundo.
Marx y Engels sólo tuvieron que poner de pie las teorías de Hegel que estaban de cabeza para llevarlas a la práctica revolucionaria en 1847 con la publicación del Manifiesto Comunista que acuñó la consigna “proletarios de todos los países uníos”. Y el 23 de junio de 1848 fue el fundamento teórico de los protagonistas del primer levantamiento obrero del mundo en Paris, Francia, así como lo fue de la guerra civil de 1871 en Francia donde surgió la memorable “Comuna de París” primer ensayo de un gobierno con democracia participativa ciudadana en la historia; el heroico pueblo de París armado garantizó la seguridad de la población y repelió las agresiones del exterior, los funcionarios de la Comuna tenían de sueldo el salario mínimo y no tomaban decisiones, estás eran potestad exclusiva de la Asamblea Popular. Marx dijo en aquel entonces: gloria por siempre a los valientes obreros de Paris, que tuvieron “la osadía de tomar el cielo por asalto.”
Lennin en Rusia fue un ideólogo con visión global que impulsó a su pueblo en octubre de 1917 a derrocar al gobierno monárquico del país más grande y poderoso del mundo en la guerra revolucionaria más corta y con el menor costo de vidas de la historia.
Bertrand Russell en Inglaterra en los años que estaba por estallar la primera guerra mundial, contra la opinión generalizada a favor de la guerra con Alemania alzó su voz y se declaró activista por la paz, por ello fue repudiado por la mayoría de sus compatriotas, lo dejaron solo y aun así no renunció a la lucha por sus ideales pacifistas.
Los hermanos Ricardo y Jesús Flores Magón, en México fueron los ideólogos y activistas que en buena medida moldearon la ideología de los precursores de los movimientos revolucionarios populares más importantes e impactantes de principios del siglo XX.
Nuestro regiomontano universal, el gran maestro Alfonso Reyes en su obra titulada Atenea Política de 1932 dejo a la humanidad futura, además de su profunda visión global (cosmopolita como él la llamaba), las herramientas, la estrategia y la ideología para la construcción de un mundo nuevo de paz, solidaridad y armonía destacando la importancia de la lejana cercanía que hermana a la humanidad más allá de las fronteras y de los países. Dijo:
“Todos los viajeros lo saben: la manera más segura de marearse es fijar los ojos en el costado del barco, allí donde baten las olas. Y el mejor remedio contra esta atracción del torbellino es levantar siempre la vista y buscar la línea del horizonte. Las lejanías nos curan de las cercanías. La contemplación del rumbo da seguridad a nuestros pasos. Cuando yo hacía mi práctica militar, el sargento instructor solía gritarnos: Para marchar en línea recta no hay que mirarse los pies; hay que mirar de frente.” (Subrayado mío)
Siendo presidente del gobierno de la república española, hubo un momento en el que Manuel Azaña sintió la necesidad de escribir: “Me lo recuerda Alfonso Reyes, el gran escritor mexicano, en un ensayo de 1932 que se titula Atenea Política. La relectura es uno de los placeres de tener tiempo. Para mí significa tener tiempo para recordar el presente, nada más y nada menos.”
En el poema “1936”, publicado en Desolación de la Quimera, Luis Cernuda contó el encuentro que tuvo, ya en los años 60, con un brigadista norteamericano que se había jugado la vida en su juventud para defender la libertad política de la república española. Aunque Cernuda estaba desilusionado por los acontecimientos y asqueado por la actitud del gobierno franquista, volvió a creer en el sentido de la lucha. Afirmó, incluso, que la dignidad de una sola persona asegura la nobleza de una causa y justifica a todo el género humano.
Luis García Montero acertadamente dijo hace poco tiempo:
“Andamos de cabeza y pensamos con los pies. La razón poética reivindica la conciencia individual, salva la libertad ética del individualismo, pero no la lleva a las aguas de la competición agresiva, ni al egoísmo del consumo, sino a un pacto de lectura, al lugar del otro, al texto, que es un espacio público dignificado por la responsabilidad individual.
Vivimos un tiempo de necesaria poesía. O, lo que es lo mismo, la lírica ofrece una buena oportunidad para estos tiempos.”
Vamos pues con alegría, decisión, coraje y valentía a la lucha contra la injusticia, a construir un mundo nuevo y mejor para nosotros, nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos, un mundo de amor, paz, solidaridad, hermandad y armonía, vamos unidos a la World Revolution.
¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
A 2 de Febrero de 2017.